La llegada del nuevo DT deberá curar un ambiente que se había contaminado. “A Piozzi lo superaron la circunstancias”, dijo Macaione. “Todo cambie de aire genera expectativas. En su momento, Piozzi mostró su carácter, pero este plantel tampoco tuvo respuestas en su momento”.
La llegada de Omar Jorge a Central Norte significó aire fresco, una bocanada de oxígeno en un ambiente que se había “contaminado” con determinadas situaciones que se comprimían en un vestuario, pero que luego de la salida del DT Hubert Piozzi, terminaron saliendo a la luz. Porque la armonía y la paz absoluta no eran lo que reinaba precisamente en el seno del Cuervo antes de la salida del DT cordobés. Agravado por la confabulación de los resultados y las derrotas que llegaban una tras otra, las relaciones humanas se agudizaban al compás del desencanto futbolístico.Hasta que apareció Jorge con su libreto bajo el brazo. El flamante técnico, que tiene en su haber un ascenso a la B Nacional, en sus primeras prácticas al frente del Cuervo mostró su carácter y dejó traslucir que en esta nueva etapa las cosas serán distintas.Un cambio de técnico luego de una crisis siempre renuevan las ganas y motivan a un plantel. Para todos. Incluso para aquellos que viene relegados y tienen pocas chances de jugar, quienes ven en una renovación la oportunidad propicia para volver a mostrarse. Así también lo entendió Macaione, la cabeza institucional, quien cortó por lo sano y le dio fin a una relación desgastada para empezar a enderezar a un equipo vapuleado. “La llegada de un nuevo técnico siempre es positiva y confiamos en que esta decisión nos dará los frutos esperados. Hay buenos jugadores que venían teniendo rendimientos malos, y hoy se motivan más. Eso se refleja a la hora de trabajar. Este nuevo técnico tiene la responsabilidad de levantar a Central y nosotros estamos para acompañarlo”, manifestó el titular Azabache, como otorgándole un guiño y un aval inicial al entrenador bonaerense en esta patriada.Y en medio de este tallar y dar de nuevo para Central Norte, que tendrá que volver a renacer mañana cuando reciba a San Martín de Tucumán en el estadio Martearena, el presidente Cuervo se refirió al saliente estratega Piozzi, relativizando los roces del último tiempo. “No hubo en cierta manera problemas graves en el vestuario, sí un profundo malestar por la campaña del equipo. Después del partido con Sportivo Belgrano, los jugadores se reunieron para sacar esto adelante. Más allá de cualquier roce o conflicto, yo creo que a Piozzi lo desbordó la circunstancia de haber tenido que manejar a un plantel con tantas figuras”, fue la lapidaria conclusión del mandamás Cuervo.
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